El vuelo fallido de la golondrina

He escuchado caer. Golpe seco sobre el papel de periódico que servía de felpudo al nido de golondrinas de mi edificio. La vida se había roto. Vida de la que días atrás brotaban crías, tal y como anunciaban las cascaras de huevo rotas que habían caído de ese mismo nido. La vida en ese instante se ha detenido. Yo que subía las escaleras me he parado, asustada. Intuitivamente he mirado hacia el suelo. Ahí la he visto: tirada, tan chiquitita, junto a un charquito de sangre. Mientras el resto revoloteaban en el nido. No sé el motivo que las agitaba, probablemente fuera su propia subsistencia. Supongo que el vacío ya habrá sido ocupado como si nada hubiera pasado, como si no hubiera fallado el vuelo de su hermana golondrina. 



Comentarios

Entradas populares